¿y que pintamos nosotros?

Don Teodoro, il consiglieri de Génova 13, cuando deje los bajos fondos y escriba su novela, “que noche la de aquel día”, nos hará participes de sus desvelos para que los murcianos, por fin, tengan el gobierno que se merecen, y es literal. 

El ADN Genovés de Génova, le llevó a saber interpretar, lo que Inés en lo alto del guindo-naranjo en flor, ni olió, había una pelea de gatas pimentoneras, eso da margen para mucho, se dijo Teo, ¡lo clavó! Asumió su propio sacrificio, siendo il capo de Murcia, toda una noche, mientras que el titular del cargo, ese zaguero gales de rugby, seguía enfurruñado y mohíno, y acrecentó su valor, al improvisar, una cuidada y rigurosa selección, con el único objetico de sentar en la mesa-banquete del gobierno, a los mas útiles y preparados, con expertis, señorío y curriculum para acallar cualquier duda al respecto. 

Hay quien le acusa de corrupción y a los tres vendidos, de vendidos, y los mas beligerantes, de tamayazo triple, poco se valora el manejo de esa nochecita de Don Teo, los que lo conocen, dicen que hasta duerme con una socarrona sonrisa ajumillada.

Ya con la fresca, a la ChoniAyuso del chotis-proces, le faltó tiempo y le sobraron mentiras para convocar un plebiscito, de ella o los soviets, y de paso, mandar a las ocurrencias del lelo de su vice de cabecera al silencio, una tragedia para la comedia española, sin duda. De momento desde Moncloa, demostrando, energía, punch e interés, han rescatado de la prejubilación a la estatua que fue, Don Ángel Gabilondo, mientras que la pinza ChoniAyuso-Vox, se acerca, quedáis avisados todos y el “centrista Casado”.

Quizás vosotros, como yo, habéis bajado ya los brazos de puro agotamiento y os preguntéis, ¿y nosotros que pintamos en todo esto?

Nada, pero ¿y lo feliz que esta Don Teo?.