Iba yo a escribir hace unos días, cuando la incidencia bajó del mágico limite de 50 casos, por fin nos habíamos "equivocado", para bien y la gestión y participación en la vacunación nos alejaba de la maldita cola mundial, donde habitamos para casi todo, si exceptuamos el número de bares por cada cien mil habitantes. Me entraron los miedos y me vine tan abajo como la energía solar cuando el astro rey traspone el ultimo cerro de poniente, eso le dijo el primo científico de Rajoy, aquel que predijo el no calentamiento del planeta, a Casado y este la ha vuelto a liar.
Aunque el virólogo estrella del gobierno alemán, Christian Drosten, ha pronosticado, que en España y Portugal la epidemia pasará en la próxima primavera, ojalá, yo no me fío. Así que y porsiaca (por si acaso) más nos vale ir copiando el modelo austriaco, confinar al no vacunado, con el añadido del pago, si o si, de todos los gastos que ocasione el bobo-negacionista por ingreso en hospitales y UCI, y la obligatoriedad del certificado covid para ir a comprar, trabajar o de copas, seas de Brunete o de la conchinchina.
Llevamos mucho tiempo de equivoco con esto de la libertad individual, que en ningún caso puede primar sobre los derechos y libertades de los demás.
No hay comentarios
Publicar un comentario