Tarde de Toros

(1) El zagal castellano, ese madelman con carita de panoli, percibe sueldo y prebendas como vicepresidente de la “Cunda” de Castilla y León, ha tenido a su jefe de filas, un tal Abascal, mudito y de cuerpo ausente varios días. Los Vo(x)cazas se han tragado el recule de Mañueco “el imposible”, sin anestesia y andan “aculados en tablas”, demostrando lo que son; humo cargado de peligrosas toxinas, porque valer lo que se dice valer: ¡na, siquiera!

(2) Nada de aculado en tablas, ¡a los corrales! Allí mismo han mandado esta mañana, al ladito de la antigua plaza de toros de “las arenas” en Barcelona, a Junqueras, que ha sido protestado y abroncado por el poco público asistente al festejo.  Así, arropado por una manada de cabizbajos fieles, se ha despedido a la francesa y ha tomado las de Bergadá o Villadiego, lo que gusten, hasta la próxima. Y menos mal, porque algún grito se ha oído para que volviera a la cárcel, ¡cielos repressio independentista! y ¡con lo que ha costado sacarlo! 

(3) A Irene Montero y al presidente del Gobierno, ya se les acumulan más de 200 rebajas de penas y unas cuantas excarcelaciones de la peor calaña y pesadilla, además de maltratadores y asesinos, que han sufrido y padecen las mujeres de toda edad y condición.

Por supuesto que nadie del Ministerio de Igualdad pretendía, con una ley que tiene aspectos positivos, que esto pasara, pero pasa. Y si la ceguera de la soberbia y la conveniencia sin escrúpulos, no fuera tan real en una y otro, y solo cupiera la más humilde de las razones, la dignidad, estos dos párrafos no tendrían sentido escribirlos a estas alturas del desastre. 

Aunque haya efectos secundarios imposibles de remediar ya, sería un buen principio de decencia y de respeto, modificar en la ley los aspectos que silenciosamente la sociedad demanda y espera.

Abusando de nuevo del símil, la ministra y su secretaria de estado están ya “pa las mulillas”, sin remedio.

Y al presidente, ya le han dado un aviso. Veremos.