JUEGO DE TRONOS O DE GAFAS
Yo no sabría decidir quién es Stark, Lannister, Targaryen, o quién es el amo y señor de La Guardia de la Noche; debo confesar que vi Juego de Tronos muy de pasada.
Por el trono es todo este juego tan simplón y aburrido.
Feijoo tenía claro que, después de la vergüenza que iba a pasar en Valencia, en el funeral de Estado por los muertos que son de todos nosotros en la DANA, lo mejor era montar un buen pollo, en eso que algunos ingenuos y malvados en general, persistentemente siguen llamando comisión de investigación. Por eso, el sainete en el corral de comedias del Senado fue ayer y no cualquier otro día.
Lo que pasa es que le equivocaron; quien designó de actor protagonista, en vez de un tipo o tipa duro, serio, frío y creíble, le colocaron a un sucedáneo de Groucho Marx. Alejo Miranda de Larra (qué bonito apellido) clavó la velocidad con la que disparaba frases y palabras el mayor de los hermanos Marx y también algunas de sus absurdeces, como preguntarle por Maduro y su dictadura o si el juez Peinado es un facha prevaricador.
No puede haber preguntas más fáciles y obvias.
Feijoo sin sus gafas; se le ve con prisas y con mala cara. Las prisas ya se saben a qué se deben, pero la mala cara, o es por una debilidad por el gen/virus de Madrid DC, como dice el gran Enric Juliana, o porque aguantarse la náusea mientras aplaude, abraza y soporta a un tipo como Mazón. Esto debe quemar mucha flora intestinal.
Mientras en la otra esquina de la hipérbole, Pedro Sánchez zoqueteó con las respuestas tan previsibles como medidas, arriesgó lo justo y salió del trance con unos pocos arañazos, aunque todo lo que le rodea aún no ha terminado; ya le gustaría.
La moraleja de esta historia es que, mientras Feijoo se ha quitado las gafas y yo no veo mejora alguna en su demacrado aspecto, Sánchez se las ha puesto; a lo mejor así ve mejor y no se le pasan por alto cosas tan graves y tipos tan repugnantes y desagradables.
El país está exhausto y el personal desquiciado. Hasta tal punto que ayer mismo por la tarde, un periódico del Madrid DC llegó a publicar el precio de las gafas de Pedro Sánchez.
Ganas de malmeter.
Saben que la vida de cada uno depende de la vida del otro. Cuando Sánchez sea historia, también lo será Feijoo. Juegan, se divierten, nada es más importante que la aniquilación del otro. No hay temas importantes en los que trabajar juntos, empujar en la misma dirección: la vivienda, la sanidad, la justicia....Y así hasta las próximas elecciones. ¡Qué pereza!
ResponderEliminar